Javier Montes Sánchez. Antes de comenzar la crónica de la 97ª edición del Giro, quiero dejar claro mi mal estar con todas las televisiones de este país (menos la ETB vasca), que han vuelto a demostrar su incompetencia, para no ser capaces de dar el gusto a los muchos aficionados de poder disfrutar de una carrera como el Giro.
Para retransmitir otros deportes, no hay problemas en gastar dinero y endeudar mas si cabe aun las arcas publicas, pero nos olvidamos de que en este deporte tenemos... Campeones del Mundo, Campeones Olímpicos, etc... pero debe ser que esto no interesa o no merece gastar el dinero en ello.
Dicho esto, felicitar a Nairo Quintana y al equipo Movistar con Eusebio Unzue a la cabeza, por otro excepcional triunfo, que ha dado como resultado, la victoria final en la edición del Giro 2014 y convertirse en el primer corredor colombiano en vestirse de rosa. El de Movistar dio una auténtico recital, especialmente en la segunda mitad de la prueba, cuando la carretera se puso cuesta arriba y en esos terrenos montañosos fue sacando tiempo al resto de favoritos al triunfo final.
Quintana, que tan solo tiene 24 años, lleva un carrera fulgurante con su primer triunfo en una grande, después de ser segundo en el Tour del año pasado y con otro dato importante además... en ambas pruebas, participaba por primera vez. Es un excepcional escalador, y a diferencia de otros compatriotas suyos, se defiende bien contra el crono, por lo que se posiciona como uno de los grandes corredores capaz de ganar rondas de 3 semanas.
Quintana, que tan solo tiene 24 años, lleva un carrera fulgurante con su primer triunfo en una grande, después de ser segundo en el Tour del año pasado y con otro dato importante además... en ambas pruebas, participaba por primera vez. Es un excepcional escalador, y a diferencia de otros compatriotas suyos, se defiende bien contra el crono, por lo que se posiciona como uno de los grandes corredores capaz de ganar rondas de 3 semanas.
En este Giro tanto él, como el equipo Movistar han sido muy criticados por no arriesgar en los primeros contactos con la montaña, pero en la segunda parte de la carrera, cuando llego lo duro de verdad, el colombiano no dejó pasar la oportunidad y se colocó en la primera posición de la general, en la etapa que finalizó en Val Martello, para dar un recital en la etapa de la cronoescalada en el alto de Grappa, donde se volvió a imponer. Pero en la jornada más esperada por los aficionados, Quintana dio otro recital... arropado por su compañero Igor Antón, se permitió el lujo de atacar a los pies del Zoncolan, para demostrar que estaba fuerte, reventando a todo sus rivales.
Este ha sido un Giro en el que los colombianos han sido protagonistas, Rigoberto Urán (Omega Pharma-Quick Step, compatriota de Quintana vistió de rosa varios días y consiguió finalizar segundo de la general. Doblete histórico para Colombia, y sorpresa para los tifosi con el italiano Fabio Aru (Astana), que a sus 23 años ganó en Montecampione y se hizo con el tercer puesto, consiguiendo su primer podio en una grande.
Ahora unos días de descanso, y a disfrutar de la Dauphine Libere y del Tour de Suisse, antes de que empiece el Tour de Francia, con un Alberto Contador que saldrá a por todas.