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| Foto by: www.fredrikclement.com |
Javier Montes Sánchez. Estaba destinado a ser una figura dentro del pelotón, una referencia, que estaría en todas las batallas con las grandes estrellas, que formaría parte del elenco de corredores que se disputan todas y cada una de las pruebas en las que participa... así fue durante los primeros años cuando en el 2005 se subía al 2 puesto del cajón del Giro de Italia.
Su palmarés, forjado sobre todo en los campeonatos nacionales de su país, donde ha logrado 9 medallas, 3 de ellas de oro en la CRI, no ha tenido más allá de los años 2009 y 2010, donde gano la Lieja-Bastogne-Lieja y el Tour de Francia, por la descalificación de Alberto Contador, más historia para un corredor que tenía que haber sido mucho más en ciclismo internacional.
Siempre lo vi como un gran corredor, pero el tener a su hermano Frank a su lado quizás le llegara a perjudicar más que beneficiar. Recuerdo aquellas etapas del Tour en las que parecía que esperaba la orden de su hermano para poder atacar a sus rivales.
Es fácil hablar cuando todo ya ha ocurrido, pero a lo mejor... si hubiera competido solo, hubiéramos visto a un Andy más ambicioso, al ataque sin esperar que alguien le diera permiso para hacer muchas cosas que a los aficionados nos hubiera gustado ver.
Aún así, se retira un gran ciclista, que después de nueve años en la cima del ciclismo, tiene que dejar el ciclismo por obligación, por una la lesión de rodilla que se producía en una caída durante el pasado Tour de Francia. Una lesión, que no ha evolucionado como debiera y que podía terminar en una lesión irreversible debido al estado del cartílago.
"Obviamente estoy decepcionado por acabar así mi carrera. Me hubiese gustado seguir luchando, pero mi rodilla no me lo permite. Desde mi caída en Reino Unido apenas ha habido algún progreso. Aunque los ligamentos se han curado, el cartílago dañado es otra historia. He estado trabajando duro en la rehabilitación de la rodilla pero ésta es la mejor manera de actuar ante el riesgo de sufrir una lesión irreversible". "El ciclismo ha sido" su "vida durante muchos años" y que, ante el inesperado final de su carrera, aún no ha pensado qué hará en el futuro, aunque ha querido destacar haberse sentido "muy feliz por haber competido y entrenado" junto a su hermano Franck y por "haber forjado grandes amistades" durante su carrera. "Siempre he dicho que el ciclismo no es el principio del fin de mi vida. Tengo una novia fantástica y un hijo estupendo. Tengo ganas de descubrir lo que me depara", declaro Schleck en rueda de prensa organizada por el equipo Trek Factory Racing.
Con el adiós del Luxemburgués y la marcha del payaso triste (Cadel Evans), el pelotón pierde dos grandes corredores que seguramente los jóvenes que vienen pisando fuerte, nos hagan, no olvidarnos de ellos, pero si seguir conseguir disfrutar de lo que más nos gusta... el ciclismo.
Su palmarés, forjado sobre todo en los campeonatos nacionales de su país, donde ha logrado 9 medallas, 3 de ellas de oro en la CRI, no ha tenido más allá de los años 2009 y 2010, donde gano la Lieja-Bastogne-Lieja y el Tour de Francia, por la descalificación de Alberto Contador, más historia para un corredor que tenía que haber sido mucho más en ciclismo internacional.
Siempre lo vi como un gran corredor, pero el tener a su hermano Frank a su lado quizás le llegara a perjudicar más que beneficiar. Recuerdo aquellas etapas del Tour en las que parecía que esperaba la orden de su hermano para poder atacar a sus rivales.
Es fácil hablar cuando todo ya ha ocurrido, pero a lo mejor... si hubiera competido solo, hubiéramos visto a un Andy más ambicioso, al ataque sin esperar que alguien le diera permiso para hacer muchas cosas que a los aficionados nos hubiera gustado ver.
Aún así, se retira un gran ciclista, que después de nueve años en la cima del ciclismo, tiene que dejar el ciclismo por obligación, por una la lesión de rodilla que se producía en una caída durante el pasado Tour de Francia. Una lesión, que no ha evolucionado como debiera y que podía terminar en una lesión irreversible debido al estado del cartílago.
"Obviamente estoy decepcionado por acabar así mi carrera. Me hubiese gustado seguir luchando, pero mi rodilla no me lo permite. Desde mi caída en Reino Unido apenas ha habido algún progreso. Aunque los ligamentos se han curado, el cartílago dañado es otra historia. He estado trabajando duro en la rehabilitación de la rodilla pero ésta es la mejor manera de actuar ante el riesgo de sufrir una lesión irreversible". "El ciclismo ha sido" su "vida durante muchos años" y que, ante el inesperado final de su carrera, aún no ha pensado qué hará en el futuro, aunque ha querido destacar haberse sentido "muy feliz por haber competido y entrenado" junto a su hermano Franck y por "haber forjado grandes amistades" durante su carrera. "Siempre he dicho que el ciclismo no es el principio del fin de mi vida. Tengo una novia fantástica y un hijo estupendo. Tengo ganas de descubrir lo que me depara", declaro Schleck en rueda de prensa organizada por el equipo Trek Factory Racing.
Con el adiós del Luxemburgués y la marcha del payaso triste (Cadel Evans), el pelotón pierde dos grandes corredores que seguramente los jóvenes que vienen pisando fuerte, nos hagan, no olvidarnos de ellos, pero si seguir conseguir disfrutar de lo que más nos gusta... el ciclismo.
