Javier Montes Sánchez. Simon Gerrans (GreenEDGE) ha ganado la 103 edición de la Milan-San Remo, tras imponerse al sprint Fabian Cancellara (RadioShack-Nissan) y Vincenzo Nibali (Liquigas-Cannondale), segundo y tercero, respectivamente. De esta forma, el australiano gana la primera clásica de la temporada. Por su parte Spartacus vuelve a repetir segunda posición al igual que en 2011, mientras que el italiano Nibali ocupó el último escalón del podio.
En el primer tramo de carrera, un total de nueve corredores llegaron a alcanzar una ventaja de siete minutos sobre el pelotón. Pero seguidamente, el grupo aumentaría su ritmo para reducir tal desventaja. En el ascenso a La Cipressa, uno de los favoritos, Philippe Gilbert (BMC), perdió todas sus posibilidades de conseguir la victoria al caerse al suelo. El final de la carrera a falta de 9 km fue muy disputado y espectacular para el aficionado... ataco con fuerza Valerio Agnoli (Liquigas), poco despues Angel Madrazo le siguió y sigiuo dejando a trás al italiano, pero el el pelotón les volvió a coger.
Una vez reagrupados, fue Nibali quien aprovechó para atacar en la cima del Poggio a seis kilómetros para la meta, detras de el salieron Cancellara y Gerrans que iban a luchar durante los ultimos kilometros en un tira y afloja con el peloton, del que tiraba Katusha sin conseguirlo.
En el primer tramo de carrera, un total de nueve corredores llegaron a alcanzar una ventaja de siete minutos sobre el pelotón. Pero seguidamente, el grupo aumentaría su ritmo para reducir tal desventaja. En el ascenso a La Cipressa, uno de los favoritos, Philippe Gilbert (BMC), perdió todas sus posibilidades de conseguir la victoria al caerse al suelo. El final de la carrera a falta de 9 km fue muy disputado y espectacular para el aficionado... ataco con fuerza Valerio Agnoli (Liquigas), poco despues Angel Madrazo le siguió y sigiuo dejando a trás al italiano, pero el el pelotón les volvió a coger.
Una vez reagrupados, fue Nibali quien aprovechó para atacar en la cima del Poggio a seis kilómetros para la meta, detras de el salieron Cancellara y Gerrans que iban a luchar durante los ultimos kilometros en un tira y afloja con el peloton, del que tiraba Katusha sin conseguirlo.
Finalmente Gerrans fue quien se adjudicó en el sprint final, donde Óscar Freire solo pudo acabar en séptima posición y no pudo conseguir su cuarto triunfo en la Milan-San Remo.
"Hice todo lo que pude. No pude hacer nada más. Desgraciadamente, las piernas no respondieron como esperaba y cuando se produjo el ataque decisivo al final, me di cuenta de que no podría luchar por la victoria", explicó Freire en un comunicado de su equipo. Freire esperaba disputar el sprint con el grupo de favoritos. "Aunque me hubiera sentido mejor, no habría intentado irme con Gerrans (vencedor final), Cancellara y Nibali. Ésta puede ser mi última Milán-San Remo, pero no estoy decepcionado. He hecho lo que he podido y no tengo nada que reprocharme".
