Miguel Senovilla. Tres años después de su expulsión del Tour de Francia y tras haberlo intentado una y otra vez durante esta edición, el kazako Vinokourov se ha hecho con su tan ansiada victoria en la 13ª etapa, entre Rodez y Revel, de 196 kilómetros de recorrido. El compañero de Contador atacó en la última cota del día a ocho kilómetros de meta desmontando el orden de los equipos de los sprinters.
La jornada se presumía tranquila para los hombres de la general justo antes de la entrada en terreno pirenaico. El recorrido, con cinco cotas puntuables, se presentaba favorable para una fuga en la que estuviesen implicados muchos equipos. Así los 'elefantes' del pelotón se podrían echar a dormir.
Sin embargo, los equipos de los sprinters no tenían los mismos planes, pese a la proximidad de la cota de Saint-Férrey de tercera categoría (1,9 kilómetros de longitud al 6 por ciento de desnivel) a menos de diez kilómetros de meta, un obstáculo que comprometía seriamente sus intereses. Nada más darse el pistoletazo de salida, se dejó hacer a tres hombres, Chavanel, Fedrigo y Flecha, que cogían seis minutos de ventaja sobre el pelotón sin excesivos problemas.
Sin embargo, hasta ahí iba a llegar la permisividad del Columbia que no quería dejar pasar la que podría ser la antepenúltima oportunidad (Burdeos y París) con todavía más de una semana de Tour por delante.
Estaban obligados a apurar sus opciones y así fue. Los tres fugados fueron alcanzados por las garras del pelotón poco antes de encarar las primeras rampas de la última cota, un final muy parecido al de la Milan-San Remo, coto vedado para Freire que suma tres victorias en su palmarés en el primer 'gran monumento' de la temporada. Pero como el mismo ha reconocido, las piernas no son las de siempre y su equipo, el Rabobank, ni siquiera apareció en las posiciones delanteras.
Quien sí estuvo delante fue el Caisse d'Epargne de José Joaquín Rojas, ayudado por un inmenso Luis León Sánchez, que respondió al ataque del italiano Alessandro Ballan, el que iba a dejar fuera de combate a los sprinters.
Fue ahí donde el más listo y el más combativo de la clase, el kazako Alexander Vinokourov, siguió los pasos del ex campeón del mundo para darle la estocada final en un falso llano envenenado justo después de coronar y antes del descenso camino de Revel, la primera ciudad que vio a Eddy Merckx alzarse con una victoria de etapa en la Grande Boucle.
'Vino', que ayer estuvo a punto de llevarse el gato al agua, por fin cumplió lo que vino a hacer en Francia. Ahora, tendrá que dedicarse en cuerpo y alma a los intereses de Contador. Buenas noticias para el de Pinto en la jornada previa a unos Pirineos más duros que nunca con motivo de su centenario como protagonista de la ronda gala. Mañana, de primer plato, Ax 3 Domaines, de primera categoría, como final de etapa, la montaña que presenció a Carlos Sastre alzar por primera vez los brazos en el Tour.
La jornada se presumía tranquila para los hombres de la general justo antes de la entrada en terreno pirenaico. El recorrido, con cinco cotas puntuables, se presentaba favorable para una fuga en la que estuviesen implicados muchos equipos. Así los 'elefantes' del pelotón se podrían echar a dormir.
Sin embargo, los equipos de los sprinters no tenían los mismos planes, pese a la proximidad de la cota de Saint-Férrey de tercera categoría (1,9 kilómetros de longitud al 6 por ciento de desnivel) a menos de diez kilómetros de meta, un obstáculo que comprometía seriamente sus intereses. Nada más darse el pistoletazo de salida, se dejó hacer a tres hombres, Chavanel, Fedrigo y Flecha, que cogían seis minutos de ventaja sobre el pelotón sin excesivos problemas.
Sin embargo, hasta ahí iba a llegar la permisividad del Columbia que no quería dejar pasar la que podría ser la antepenúltima oportunidad (Burdeos y París) con todavía más de una semana de Tour por delante.
Estaban obligados a apurar sus opciones y así fue. Los tres fugados fueron alcanzados por las garras del pelotón poco antes de encarar las primeras rampas de la última cota, un final muy parecido al de la Milan-San Remo, coto vedado para Freire que suma tres victorias en su palmarés en el primer 'gran monumento' de la temporada. Pero como el mismo ha reconocido, las piernas no son las de siempre y su equipo, el Rabobank, ni siquiera apareció en las posiciones delanteras.
Quien sí estuvo delante fue el Caisse d'Epargne de José Joaquín Rojas, ayudado por un inmenso Luis León Sánchez, que respondió al ataque del italiano Alessandro Ballan, el que iba a dejar fuera de combate a los sprinters.
Fue ahí donde el más listo y el más combativo de la clase, el kazako Alexander Vinokourov, siguió los pasos del ex campeón del mundo para darle la estocada final en un falso llano envenenado justo después de coronar y antes del descenso camino de Revel, la primera ciudad que vio a Eddy Merckx alzarse con una victoria de etapa en la Grande Boucle.
'Vino', que ayer estuvo a punto de llevarse el gato al agua, por fin cumplió lo que vino a hacer en Francia. Ahora, tendrá que dedicarse en cuerpo y alma a los intereses de Contador. Buenas noticias para el de Pinto en la jornada previa a unos Pirineos más duros que nunca con motivo de su centenario como protagonista de la ronda gala. Mañana, de primer plato, Ax 3 Domaines, de primera categoría, como final de etapa, la montaña que presenció a Carlos Sastre alzar por primera vez los brazos en el Tour.